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Lavar un saco de dormir: El cuidado correcto para las plumas y las fibra sintéticas

¿Te gustan las actividades al aire libre y sueles pasar alguna noche en la tienda de campaña? Entonces es irremediable: en algún momento tendrás que lavar tu saco de dormir. ¿En la lavadora o a mano?, ¿a qué temperatura?, ¿qué más deberías tener en cuenta?, nuestros consejos te aclararán las incógnitas.

  • Por lo general se puede lavar todo saco de dormir. Pero solo debería lavarse si está muy sucio y raras veces. ¿Por qué? Si lavas tu saco de dormir demasiadas veces o de forma incorrecta podrías dañar el material y tu saco podría perder su esponjosidad. Por consiguiente no es recomendable lavar un saco de dormir nuevo. No es necesario e incluso podría dañar tu nueva adquisición antes del primer uso.

    Incluso si tu saco de dormir tuviera manchitas pequeñas u oliera raro no tienes por qué lavarlo completamente. Intenta quitar las manchas con una esponja, agua templada y un chorro de lavavajillas.

    Para evitar olores desagradables, es recomendable ventilar el saco con regularidad. Cuelga tu saco de dormir frecuentemente con la cremallera abierta en un lugar seco. Evita la luz solar directa pues la radiación UV podría dañar el material. Lo mejor es que estires el saco de dormir por la mañana, justo después de levantarte, para colgarlo encima de la tienda de campaña o la puerta abierta del coche.

    Solo si te fuera imposible quitar las manchas o el olor de esta manera, tendrás que lavar el saco completo; a poder ser, con un producto especial . Lo más habitual es que el saco no requiera un lavado antes de haber sido usado unas 50 o 60 noches. Si usas un pijama largo o una capa interior lavable (una especie de saco de dormir interior muy fino) incluso puedes retrasar más el lavado.

  • Ahora nos enfrentamos a la pregunta principal: ¿Cómo lavo bien mi saco de dormir? La respuesta depende del saco de dormir que tengas: La limpieza de un saco de dormir de fibra sintética resulta más fácil que si se trata de un saco de plumas, pues el material es menos delicado. En ambos casos debes echar primero un vistazo a las indicaciones incluidas en la etiqueta de cuidado. Esta te indicará si puedes lavar tu saco de dormir en la lavadora, la temperatura de lavado admitida y qué programa de lavado deberías seleccionar.

    En general se recomienda seguir los siguientes pasos para el lavado de un saco de dormir de fibras sintéticas :

    • Cierra todos los botones, las cremalleras y velcros.
    • Controla si el saco de dormir muestra grietas u otros daños y arréglalos.
    • Si contará con cordones, debes soltarlos.
    • Vuelve le saco de dormir del revés. De esta forma proteges el exterior.
    • La lavadora debería acoger como mínimo 8 kilos.
    • Selecciona un programa de lavado para ropa delicada y una temperatura de 30 grados.
    • El centrifugado debería ser corto.
    • Emplea un detergente para ropa delicada o prendas técnicas.
    • ¡No uses suavizantes o blanqueadores!

    Si se trata de un modelo con plumas, el procedimiento es otro. Entonces se recomienda el lavado a mano. Así de fácil es lavar un saco de dormir de plumas:

    • Cierra todos los botones, las cremalleras y velcros.
    • Controla si el saco de dormir muestra grietas u otros daños y arréglalos.
    • Si contará con cordones, debes soltarlos.
    • Vuelve le saco de dormir del revés. De esta forma proteges el exterior.
    • Llena la bañera limpia con agua templada.
    • Sumergir el saco de dormir completamente en el agua hasta que el material se haya empapado completamente.
    • Emplea un detergente para plumas.
    • ¡No uses suavizantes o blanqueadores!
    • Masajea el producto suavemente antes que el saco de dormir lo absorba. No amases o retuerzas el saco de dormir con demasiada fuerza para evitar dañar las costuras.
    • Deja el saco de dormir unos treinta minutos o una hora a remojo.
    • Desagua la bañera y aclara el saco de dormir varias veces hasta que no salga más espuma.
    • Aprieta el saco de dormir con suavidad para escurrir el agua.
  • Para el secado, estira el saco de dormir y colócalo en horizontal sobre tu tendedero. ¡Evita colgar el saco de dormir para que no se dañen el material exterior y las costuras! Permite que tu saco de dormir se seque durante un día, o como mínimo varias horas, al aire. A continuación lo podrás meter en la secadora, siempre que esta pueda acoger como mínimo ocho kilos. Sigue así:

    • Selecciona un programa para ropa delicada.
    • Ajustar la temperatura a como máximo 40 grados (¡véase la etiqueta de cuidado!).
    • Mete tres pelotas de tenis limpias junto con el saco de dormir en el tambor de la secadora. Sobre todo si se trata de un saco de dormir de plumas, las pelotas favorecen el movimiento del relleno y restablecen la esponjosidad de las plumas.
  • Si sigues además estos consejos para el almacenamiento seguro que podrás disfrutar durante mucho tiempo de tu saco de dormir:

    • Introduce el saco de dormir en la bolsa de almacenamiento solo si está completamente seco y limpio.
    • A la hora de guardar el saco de dormir recomendamos embutir el saco de dormir y no enrollarlo. Así sufren menos los sacos, tanto si son de fibras naturales como de plumas.
    • Una vez llegues a casa, se recomienda sacar el saco de dormir de su bolsa de almacenamiento para guardarlo en una bolsa más amplia. De esta forma mantendrá su esponjosidad por más tiempo.

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